jueves, 5 de mayo de 2011

Ciudad Deportiva Telmo Martín, en Pontevedra: nada de nada




Como todos sabemos, en periodos electorales prima entre nuestros políticos la consigna de "prometer para no cumplir", consigna que durante décadas se ha venido repitiendo para degradación de la vida política y de nuestra democracia.

A modo anecdótico traigo a colación la reciente promesa electoral del populista Telmo Martín, candidato del PP a la alcaldía de Pontevedra, que nos ha prometido una ciudad deportiva, de mas de 100.000 m2, tras enterrar la vía del tren en Pontevedra.

Hace años, en Sanxenxo, Telmo tambien prometió una ciudad deportiva que a fecha de hoy permanece como estaba: nada de nada.

También Telmo prometió en Sanxenxo una red de museos, que a fecha de hoy está como estaba: nada de nada.

De la ciudad del caballo que Telmo prometía para Sanxenxo, a fecha de hoy estamos como estábamos: nada de nada.

Del la Ciudad Educativa que Telmo anunció en Monte Faro, para agrupar todos los colegios e institutos de Sanxenxo, también estamos como antes: nada de nada.

Los ciudadanos deberíamos tener en cuenta estos paripés electorales y razonar nuestro voto, evitando repetir errores pasados y confiando nuestra representación a políticos sinceros y honestos, que tengan como objetivo servir a la sociedad, evitando servirse de ella; y donde los interese públicos primen sobre los privados y los partidistas.


Para ello es ineludible la reforma de la ley electoral y que la eleción de nuestros alcaldes se haga de forma directa por los vecinos, en segunda vuelta si fuese necesario, y no por los concejales con inevitables interes "partidistas"

De eso hablamos, y mucho, en UPyD

lunes, 21 de marzo de 2011

Absurdos de la Justicia

Recientemente he escuchado durante el mismo informativo dos recientes sentencias de la justicia española, que han traido a mi cabeza el verdadero sentido de la palabra "absurdo/a"

En la primera de ellas, condenaban a dos ciudadanos vascos a una pena de prisión de 377 años de carcel. En la segunda, condenaban a dos ciudadanos andaluces a 32 años de carcel.

Sin duda alguna, a primera vista cabría deducir que la condena a 377 años de carcel debió producirse por un terrible acto de violencia que hubiese producido la muerte de un ser humano, y la de 32 años por similares actos, pero en el que se diesen circunstancias atenuantes.

La sorpresa viene al desvelarse las identidades de los reos y los delitos cometido. La condena de 377 años se aplica a dos etarras que "planearon" matar a otro ser humano, pero que no llegaron a atentar contra su vida.

La segunda se aplica al violador y asesino de la niña Mariluz Cortés, y a su hermana, complice de arrojar a la ría el cuerpo aún con vida de una infante.

No dudo que las referidas sentencias se ajusten a la ley, pero lo que si parece cierto es que los fallos de ambas no se ajustan a lo que los ciudadanos de a pié creemos que debe ser la Justicia.

Cuando el Primer Congreso Nacional de UPyD aprobó una resolución para incorporar a la Legislación Española la pena de "cadena perpetua revisable", lo que realmente hizo fué elevar a categoría política lo que es un derecho de la sociedad española para defenderse ante semejantes "depredadores"